Premisas Equivocadas: Espectro y Conectividad en Riesgo
No es un asunto menor el costo fiscal por el uso del espectro radioeléctrico por el que hoy cursamos nuestras comunicaciones de voz y datos inalámbricas, en número que en junio pasado llegaba a 119.0 millones de líneas. En otras palabras, prácticamente todos en México contamos con una línea celular. Inimaginable ya prescindir de esa conectividad.
En días recientes la SHCP presentó su Paquete Económico 2021 en el que, por ejemplo, para actualizar y establecer nuevas cuotas anuales por el uso y explotación del espectro radioeléctrico, parte de una premisa falsa, que “se encuentran por debajo de sus referencias internacionales”. Categóricamente falso y erróneo. Tanto que, de aprobarse esta medida de desesperación fiscal, los pagos por la banda de 800 MHz resultarían 5.6 y por la banda de 600 MHz hasta 13.6 veces en veces más caros, que en aquellos países de nuestros principales socios comerciales.
Se estima que el pago por derechos por uso de espectro ascendió a 5.8% de los ingresos del segmento móvil durante 2019, pero con diferencias significativas entre operadores. Mientras que el preponderante Telcel sólo destinó 3.1% de sus ingresos móviles, AT&T lo hizo en 11.5% y Telefónica en 14.7%. Es decir que en promedio los competidores erogaron 4 veces más recursos por el uso del espectro el año pasado.
Esta disparidad por el pago de derechos por el uso del espectro en 2019 ha propiciado que el margen de ganancias (EBITDA por sus siglas en inglés) de América Móvil haya sido de 37.1% en 2019, mientras que para AT&T fue de -7.8% y de -10.4% para Telefónica.
De haber registrado un margen similar del pago de derechos por el espectro, los operadores competidores en su conjunto habrían obtenido ganancias de aproximadamente 475 millones de pesos en lugar de una pérdida neta de 7,277 millones de pesos.
Esta distribución resulta ser más inequitativa al contrastar con los ingresos generados por cada MHz asignado.
En el segundo trimestre del 2020, mientras Telcel generó 142.8 millones de pesos por MHz, mientras que Movistar y AT&T reciben 37.2% y 68.1% menos recursos respectivamente.
En caso de concretar el error de encarecer el espectro, sería el preponderante quién con su mayor capacidad financiera atenuaría impactos en costos, continuadamente afectando el avance en competencia en este mercado.
Con base en las estructuras de ingresos y costos descritas, es previsible que, de incrementarse el costo del espectro, los operadores, sobre todo los competidores, se verán obligados a subir sus precios. Además, poniendo en riesgo su permanencia en México, con sus acentuados márgenes negativos.
El alto costo por el espectro dio lugar a la devolución de frecuencias por parte de Movistar, quien han optado adquirir capacidades de otros jugadores para proveer servicios. Ello provocó ya pérdidas al erario, puesto que el operador pasó de pagar en 2019 derechos anuales de $3.3 mil millones de pesos (mmdp) a $2.5 mmdp durante 2020, cifra que continuará en descenso hasta que ese operador concluya la devolución del espectro en su totalidad.
Así, el alza injustificada en el precio por derechos por uso de espectro propuesta por la SHCP resultará no sólo en el incremento de corto plazo en los precios pagados por los consumidores, sino en afectaciones de largo plazo en la estructura competitiva del mercado de telecomunicaciones móviles, y con todo, en pérdidas en el bienestar social.