Pandemia y Conectividad en el 2020
A más de un año de esta era pandémica, hoy tenemos muy claro que la conectividad ha sido una suerte de vacuna, para la operación social y del aparato productivo.
Ha sido también un ‘empujón digital’, en el sentido que ha contribuido a acelerar y profundizar el acceso, el consumo y el gasto en conectividad de los hogares y unidades económicas, como lo corroboran ya las estadísticas disponibles al cierre de 2020.
Acceso a la Conectividad. De acuerdo las métricas reportadas por The Competitive Intelligence Unit (The CIU), el número de accesos a la banda ancha fija (BAF) en México alcanzó un total de 22.3 millones, nivel que representa el regreso a un crecimiento anual de dos dígitos, equivalente a 13.3% y todo, en ese año pandémico.
Durante el mismo periodo, también se aceleró la contratación del servicio de TV de paga (por cable y satelital), al ser la principal vía de acceso a contenidos de entretenimiento, culturales, educativos y deportivos para individuos y hogares mexicanos. Con todo, alcanzó a sumar 30.5 millones de suscripciones al finalizar 2020, esto es 9.1% más en su comparativo anual.
En buena medida, su importancia radica en el hecho de que las capacidades desplegadas por las redes fijas permiten la provisión de una diversidad de servicios convergentes, entre los que se encuentran precisamente la BAF, la TV de paga, la telefonía fija e incluso, recientemente agregada, la conectividad celular, con lo que resulta en un primer ejercicio de cuádruple play. A la vez, estas han demostrado la robustez de las inversiones realizadas principalmente, por los operadores cableros, para dar soporte al continuo consumo incremental de ancho de banda, aplicaciones, comunicaciones, entre otros.
Consumo de la Conectividad en 2020. Por su parte, en su reporte sobre “Contratación y Patrones de Consumo de los Usuarios de Servicios de Telecomunicaciones Fijas Antes y Durante la Pandemia ocasionada por la Covid-19”, el IFT evidencia la profundización en el uso y gasto en la conectividad durante esta crisis sanitaria y económica.
Destaca ahí que son cada vez más los usuarios que optan por contratar de manera empaquetada servicios fijos de telecomunicaciones (63.2% del total), así como aquellos que han elegido mayores velocidades de descarga de datos al contratar BAF, tal que aumentó en 18.3 puntos porcentuales la proporción del total de usuarios que cuentan con un ancho de banda igual o mayor a los 20 Mbps (64.7%).
Mientras que, en términos de gasto, el monto promedio mensual destinado en la contratación de internet fijo ascendió a $482 pesos al cierre de 2020, esto es 6.4% superior al registrado en su medición previa de 2019. Asimismo, ha aumentado la proporción del número de usuarios que tienen contratados más de 100 canales de TV de paga, al pasar de una razón de 20.9% en 2019 a una de 26.8% del total en 2020.
Lo anterior, es muestra de las capacidades incrementales, robustez y confiabilidad de las redes fijas, especialmente de aquellos jugadores cableros, aunado a la creciente preferencia de los consumidores por los empaquetamientos, así como del mayor gasto destinado a la contratación de servicios.
Todo ello ha sido consecuencia de este año pandémico que, si bien ha causado estragos significativos en diferentes sectores de la economía, también ha sido catalizador del acceso y uso de la conectividad en procesos productivos, actividades educativas, compra y uso de bienes y servicios, acceso al entretenimiento, entre otros.