Avance de la Conectividad Móvil y 5G en Latinoamérica
La región de Latinoamérica registra una relación positiva entre la adopción al servicio de Banda Ancha Móvil (BAM) y la cobertura 5G, implicando que la mayor demanda de conectividad móvil alimenta al desarrollo de 5G.
Entre los países analizados, Chile destacaría tanto por el número de conexiones per cápita a la BAM (237) y cobertura 5G (57% de la población), le seguiría México, que registraría 221 suscripciones per cápita y una cobertura de 5G de 54% en 2025. Ello impulsaría la adopción del servicio.
Guatemala, República Dominicana y Colombia registrarían los niveles de adopción de 5G más bajos, con razones que no superarían el 5%.
Para aprovechar plenamente los beneficios de 5G, es esencial implementar medidas estratégicas como la gestión eficiente del espectro, la reestructuración de impuestos sectoriales y la eliminación de barreras regulatorias.
La adopción de la Banda Ancha Móvil (BAM) y la cobertura de 5G son dos métricas cruciales para dimensionar el desarrollo y la expansión de la infraestructura de telecomunicaciones móviles en América Latina.
La accesibilidad a la BAM hace referencia al acceso a internet de alta velocidad a través de dispositivos móviles, servicio que ha transformado significativamente la manera en que la población accede a información, servicios de comunicación, entretenimiento y otros. Por su parte, la cobertura 5G implica la disponibilidad de redes de nueva generación, que ofrecen mayor velocidad, menor latencia, mejor confiabilidad del servicio, así como la capacidad de conectar una gran cantidad de dispositivos simultáneamente.
El análisis del avance de estas dos variables en la región de Latinoamérica, utilizando estimaciones a 2025, revela una correlación positiva entre el número de conexiones per cápita a la BAM y la cobertura de 5G. En otras palabras, los países que contarían con mayor adopción de BAM registrarían una mayor cobertura de 5G. Esta relación se puede atribuir a múltiples factores.
Factores de Impulso a la Conectividad Móvil
En primer lugar, los países con mayor adopción de la BAM o un mayor número de conexiones per cápita cuentan con una infraestructura tecnológica más avanzada y robusta, lo que facilita la transición a redes 5G. La demanda de servicios móviles de nueva generación crea un entorno favorable para la implementación de 5G, tal que los operadores están más dispuestos a invertir en mejoras tecnológicas cuando hay un mercado preparado para adoptar estas nuevas capacidades.
En segundo lugar, el marco regulatorio y las políticas gubernamentales juegan un papel determinante. Los países que han adoptado políticas proactivas para la asignación de espectro y que han simplificado los procesos de despliegue de infraestructura son aquellos en los que la cobertura de 5G se ha expandido más rápidamente. Estas políticas estimulan la competencia y el ejercicio de inversiones, acelerando el despliegue de nuevas tecnologías.
Relación entre Conexiones BAM (per cápita) y Cobertura Poblacional 5G (% poblacional)
Entre los países analizados, Chile destaca como el líder en el desarrollo de la conectividad móvil en América Latina, con las más altas métricas en ambas variables: 237 suscripciones per cápita de BAM y una cobertura de 5G que alcanzaría a 57% de la población. A Chile, le seguiría México, que registraría 221 suscripciones per cápita y una cobertura de 5G de 54%. En el otro extremo del espectro, Guatemala se ubicaría con 17 suscripciones per cápita a la BAM y una cobertura de apenas 20%.
El resto de los países, como República Dominicana, Argentina, Uruguay, Colombia, Perú y Brasil, se encuentran reunidos en un rango intermedio. Específicamente, República Dominicana contaría con 81 suscripciones per cápita, mientras que Colombia alcanzaría 166, con un avance del desarrollo de 5G aproximado a 30% de la población. Mientras que en los casos de Perú y Brasil el despliegue llegaría a 47% y 40% el próximo año.
Todo ello, ilustra una relación lineal positiva entre el grado de desarrollo de la infraestructura de conectividad, medido a través del número de conexiones a la BAM per cápita, y la cobertura de 5G, donde los países con mayores conexiones a la BAM tenderían a registrar una mayor cobertura de 5G. Esto resalta la importancia de impulsar la inversión en infraestructura y el desarrollo tecnológico en la región.
Medidas de Impulso para el 5G en América Latina
Para impulsar el despliegue de 5G en América Latina, se han identificado varios mecanismos clave para maximizar su potencial y asegurar su mayor aprovechamiento. Estas medidas abarcan desde la asignación del espectro y sus enfoques de licenciamiento hasta la reestructuración de impuestos sectoriales y la eliminación de obstáculos regulatorios.
Los servicios de 5G requieren más espectro en una diversidad de bandas, al utilizarse una gama más amplia de frecuencias, incluidas las bandas bajas, medias y altas, para ofrecer velocidades más altas y menor latencia. La disponibilidad y gestión eficiente de este recurso esencial es insumo principal de 5G. Los enfoques de licenciamiento del espectro también juegan un papel determinante para la transición a redes de nueva generación. Las políticas de licenciamiento deben ser transparentes, competitivas y orientadas para incentivar la inversión y el desarrollo de infraestructura en el largo plazo.
Entre los países de la región, Chile se posicionaría como el líder destacado en la adopción de 5G con un estimación de 37% del total de las conexiones móviles al 2025 de acuerdo con la GSMA, nivel muy superior a la del resto de los países, resultado de la implementación de políticas de telecomunicaciones favorables al desarrollo de nuevas tecnologías. Brasil y México le seguirían con 16% y 13%, respectivamente, mientras que Guatemala, República Dominicana y Colombia registrarían los niveles de adopción más bajos, con razones que no superarían el 5%. Estos datos reflejan una significativa disparidad en el avance y consecuentemente, la adopción de 5G en la región.
Adopción de 5G, Estimación a 2025
(Proporción del Total de Conexiones Móviles, %)
Aunado a lo anterior, reestructurar los impuestos específicos del sector y las tasas regulatorias puede estimular la inversión en 5G, el crecimiento económico y el bienestar en general. Al reducir las cargas fiscales y regulatorias, los gobiernos pueden incentivar a las empresas a invertir en la infraestructura necesaria para el despliegue de 5G. Asimismo, eliminar obstáculos para el despliegue de redes es menester para fomentar la implementación de 5G. Esto incluye simplificar los procesos en la obtención de permisos, facilitar el acceso a sitios para la instalación de infraestructura y reducir las barreras burocráticas que retrasan la implementación de redes.
Eliminar las asimetrías normativas y desarrollar la coordinación entre sectores también es fundamental para el éxito del 5G. Esto implica armonizar las regulaciones y asegurar que todos los sectores involucrados trabajen juntos para facilitar el despliegue y la operación de las redes 5G. Además, los responsables de políticas deben establecer reglas uniformes para los campos electromagnéticos que no sean más restrictivas que los niveles acordados internacionalmente. Estas reglas deben ser claras y basarse en la evidencia científica para evitar restricciones innecesarias que puedan dificultar el despliegue de 5G.
Los marcos de garantía de la seguridad también pueden ayudar a robustecer el despliegue de 5G. Implementar estándares y prácticas de seguridad robustas es un elemento necesario para proteger las redes 5G de amenazas cibernéticas y asegurar la confianza de los usuarios, las empresas y las industrias en estos servicios.
En conclusión, la relación positiva entre el nivel de adopción de la BAM y la cobertura de 5G en países de América Latina subraya la interdependencia de estas dos métricas que dimensionan el grado de avance de la conectividad móvil en la región.
Países como Chile y México, que lideran en ambos indicadores, demuestran que una infraestructura de redes robusta y una elevada adopción de la BAM son fundamentales para fomentar el despliegue de 5G. Para aprovechar plenamente los beneficios de 5G, es esencial implementar medidas estratégicas como la gestión eficiente del espectro, la reestructuración de impuestos sectoriales y la eliminación de barreras regulatorias. Estas acciones no sólo incentivarán la inversión y el desarrollo de 5G, sino que también promoverán el crecimiento económico y la transformación digital en la región.